Pago de incapacidades IMSS: cómo solicitarlo

Existen circunstancias emergentes que pueden vivir los colaboradores de una empresa, y es importante que si existe una situación de salud que impida trabajar, se conozcan los pasos para solicitar una incapacidad en el IMSS, ya que forma parte de los beneficios para empleados.

Este proceso se encuentra gestionado por el Instituto Mexicano del Seguro Social y brinda a los empleados un apoyo económico durante el tiempo que se encuentren incapacitados para prestar sus servicios en la empresa. 

En este artículo vamos a conocer cómo puedes solicitar el pago de incapacidades IMSS y todo lo relacionado con este apoyo.

¿Cómo solicitar una incapacidad en el IMSS?

Solicitar una incapacidad ante el IMSS es un proceso sencillo, pero requiere cumplir con ciertos pasos para garantizar que todo esté en orden. Vamos a explicar cómo hacerlo, ya sea de forma presencial o digital.

Acude a consulta médica en el IMSS

El primer paso es acudir a una clínica del IMSS para ser evaluado por un médico. Durante la consulta, el especialista revisará tu estado de salud y determinará si estás en condiciones de continuar con tus actividades laborales.

Obtén el certificado de incapacidad

Si el médico considera que no puedes trabajar, te emitirá un certificado de incapacidad temporal, el cual respalda tu derecho a ausentarte por motivos de salud. 

Este documento es fundamental, ya que debes entregarlo a tu empleador para que quede constancia oficial de tu situación y puedas recibir el subsidio correspondiente.

Alternativa digital: desde tu celular o computadora

Como alternativa, puedes hacer el trámite en línea a través de la app IMSS Digital o ingresando al sitio web oficial del IMSS. En esta modalidad, el proceso es muy similar: después de completar los pasos y la validación médica, recibirás tu certificado en formato electrónico, listo para compartir con tu empresa.

Consideraciones importantes

Es importante tener en cuenta que la incapacidad debe tramitarse el mismo día en que se presenta la condición médica o, en su defecto, dentro de los plazos establecidos por el IMSS para que no pierdas el derecho al subsidio. 

Además, asegúrate de tener tu número de seguridad social (NSS) y CURP a la mano para facilitar el proceso, ya sea presencial o digital.

¿Cuánto tiempo tengo para tramitar una incapacidad ante el IMSS?

Una vez que un médico del IMSS te emite el certificado de incapacidad, cuentas con un plazo máximo de cinco días hábiles para tramitarla oficialmente ante el Instituto. 

Este tiempo es clave, ya que superarlo puede significar la pérdida del derecho al subsidio económico que corresponde por tu ausencia laboral.

¿Qué hacer en caso de incapacidad por riesgo de trabajo?

Si la incapacidad se debe a un riesgo de trabajo, es fundamental que informes de inmediato a tu empleador. Esto permitirá que la empresa realice el registro correspondiente ante el IMSS y se dé seguimiento al caso conforme a lo establecido en la ley.

Incapacidades prolongadas

En situaciones donde la incapacidad se extiende por varios días o semanas, deberás acudir a revisiones médicas periódicas. Estas consultas son necesarias para que el médico determine si es apropiado extender el certificado y, por lo tanto, mantener activo el subsidio que recibes.

¿Cuánto tiempo tarda el IMSS en depositar una incapacidad?

Una vez que has tramitado correctamente tu incapacidad, el IMSS generalmente realiza el depósito del subsidio en un plazo de tres a cinco días hábiles. 

Sin embargo, es importante tener en cuenta que este tiempo puede variar en función de factores como la carga administrativa, la verificación de datos y el cumplimiento de los requisitos por parte del trabajador.

El pago se deposita directamente en la cuenta bancaria que tengas registrada ante el IMSS, por lo que conviene revisar que la información esté actualizada y sea correcta. Cualquier error en los datos puede retrasar el proceso.

¿Qué hacer si no recibes el pago a tiempo?

En caso de que el depósito no llegue en el tiempo estimado, lo mejor es acudir a la subdelegación del IMSS que te corresponde o comunicarte a la línea de atención del Instituto. Allí podrán ayudarte a identificar el problema y orientarte en los pasos a seguir.

Tipos de incapacidades cubiertas por el IMSS

El IMSS contempla diversos tipos de incapacidades, diseñadas para respaldar a los trabajadores cuando enfrentan situaciones que afectan su salud. 

Cada una está pensada para responder a distintas circunstancias, asegurando que los colaboradores reciban el apoyo económico adecuado según su diagnóstico.

Cabe mencionar que el tipo de incapacidad y la decisión del personal médico inciden directamente en el monto del subsidio que se otorga, por lo que es importante conocer las características de cada una.

Incapacidad por enfermedad general

Este tipo de incapacidad se otorga cuando el trabajador presenta una enfermedad común que no está relacionada con su actividad laboral. Algunas de las condiciones más frecuentes en esta categoría incluyen infecciones respiratorias, hipertensión y diabetes, entre otras.

En estos casos, el IMSS otorga un subsidio económico equivalente al 60% del salario registrado del trabajador, comenzando a partir del cuarto día de incapacidad. Esta medida busca ofrecer un respaldo financiero mientras el colaborador se recupera y está imposibilitado para desempeñar sus funciones laborales.

Incapacidad por riesgo de trabajo

Cuando un colaborador sufre un accidente o desarrolla una enfermedad como consecuencia directa de sus funciones laborales, se activa la incapacidad por riesgo de trabajo. 

Este tipo de incapacidad es especialmente relevante en México, un país con altos índices de accidentes laborales. Tan solo en 2022, los incidentes más comunes reportados incluyeron caídas, golpes y sobreesfuerzos.

En estos casos, el apoyo económico comienza desde el primer día de incapacidad y puede cubrir hasta el 100% del salario del trabajador, dependiendo de la gravedad de la lesión o enfermedad. 

Incapacidad por maternidad

La incapacidad por maternidad está destinada a proteger a las colaboradoras durante las etapas previas y posteriores al parto. Este beneficio cubre un total de 84 días: 42 días antes de la fecha probable de parto y 42 días después del nacimiento del bebé.

Durante este periodo, el IMSS otorga el 100% del salario base de cotización de la trabajadora, permitiéndole enfocarse en su salud y en el cuidado del recién nacido sin que esto represente una carga económica. 

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