Existen diferentes tipos de estaciones de carga, las de autoconsumo y las de electricidad, que son relevantes por la expansión de este tipo de vehículos en México, habiendo actualmente más de 3,000 ubicaciones disponibles, de acuerdo con Electro Movilidad Asociación México (EMA).
Esto hace que sea más importante para propietarios y empresas con flotillas tener información sobre cómo funcionan, los tipos que hay y, sobre todo, cómo y dónde se puede recargar una unidad. Así que aquí te lo contamos.
La estación de carga de autos hace referencia a un sitio en el que puedes cargas gasolina para tus vehículos o, en su caso, la batería de un auto eléctrico o híbrido.
Las estaciones eléctricas se suelen ubicar en espacios públicos, como centros comerciales, y por lo regular, hay diferentes estaciones de acuerdo con las necesidades de la población o la afluencia de tráfico.
Por otro lado, las estaciones de autoconsumo mayormente se ubican en las mismas instalaciones de la empresa que la posee, según el tipo de operación y servicios.
Las estaciones de carga de autos tienen un sistema que, aunque puede parecer complejo, es bastante simple, aunque siempre dependerá de los tipos de punto de recarga existentes.
Vamos a ver los pasos para ambas estaciones:
Este tipo de estaciones están diseñadas para que las empresas con flotillas tengan la capacidad de administrar su propio combustible en sus instalaciones.
De esta manera, evitan desplazamientos, parones por falta de gasolina y pueden tener un mejor control del consumo de cada unidad o conductor.
Funcionan de la siguiente manera:
Deben instalarse tanques para almacenar la gasolina, los cuales tienen que cumplir con determinadas normativas de seguridad y medio ambiente vigentes en México, como la Comisión Reguladora de Energía (CRE) o la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (SEA).
Su función es como la de una gasolinera pequeña.
Se usan dispensadores similares a los de una estación normal y pueden ser manuales o automatizados y hasta incluir identificadores para saber qué vehículos hacen recargas y cuánto consumen en cada una de las cargas.
Los sistemas de estaciones de carga de autoconsumo actuales pueden contar con tecnologías como:
Las estaciones de autoconsumo se pueden complementar con software para generar reportes detallados sobre el uso de gasolina: litros que se cargan, horarios, rendimiento por unidad, y más.
Gracias a esto, las empresas pueden detectar anomalías, reducir costos de operación y optimizar rutas para una mayor eficiencia.
Lo primero es hacer la conexión física entre el vehículo y la estación.
Se debe elegir el puerto de carga adecuado, que varía según el tipo de cargador, aunque todos cumplen la misma función: permitir que fluya la energía hacia la batería.
Hay que tener en cuenta que, en algunos puntos de carga públicos, se debe activar la estación mediante una app, tarjeta RFID o código QR antes de enchufar el auto.
Las baterías de las unidades eléctricas almacenan solo corriente continua (CC), mientras que las redes eléctricas entregan corriente alterna (CA).
Dependiendo de la tecnología de la estación de carga, se da el proceso de conversión.
Cuando la corriente se convierte, empieza el flujo de electricidad hacia la batería de la unidad.
Este es constante y controlado. La velocidad va a depender del tipo de cargador que se emplee y de la capacidad del vehículo para recibir energía.
Durante todo el proceso de carga, el sistema de la estación de carga tiene que verificar el estado de la batería, la temperatura, el voltaje y otros factores para que no haya sobrecargas.
Algunas funciones de estos sistemas de gestión incluyen:
Este proceso de carga acaba cuando la batería alcanza el máximo nivel o se llega al programado de carga. Asimismo, puede suceder que los usuarios densidad interrumpir el proceso retirando el cable o mediante la app de control.
Sin importar cuál sea el caso, se detiene el suministro eléctrico, para garantizar que no haya riesgos ni se desperdicie energía de la estación de carga.
Hay diferentes tipos de estaciones de carga de autos, las cuales se clasifican según características principales. Vamos a verlas:
Uno de los factores para diferenciar las estaciones de carga de autos es la velocidad con que cargan las baterías:
Este tipo de estaciones de carga ofrecen el servicio con una duración de más de 5 horas, por lo que se debe considerar al elegirlas.
Aunque son la opción más lenta, en la actualidad, son las más extendidas a nivel mundial, pues apenas se está dando el paso hacia el uso de vehículos eléctricos o híbridos.
Esta estación de carga de autos tiene una potencia máxima de 22 kW, por lo que el vehículo puede cargarse por completo en, alrededor de 2 horas.
El tiempo dependerá de varios factores, como el tipo de batería de la unidad y la potencia que se emplee para este proceso.
Para cuando hay menos tiempo, existen opciones como las de recarga rápida, cuya duración es de 40 minutos para llenar la batería de un vehículo eléctrico a una potencia de 50 kW.
Las baterías de los autos eléctricos funcionan por medio de corriente continua (DC). Las estaciones pueden variar según el tipo de suministro eléctrico del que disponen (AC o DC).
Si habla de una estación de carga AC, se hace referencia a que los cargadores dan energía alterna a la salida del cargador para alimentar mediante el cableado la batería del auto.
Este tipo de enchufes se emplean, regularmente, con tomas de corrientes de 220-230 voltios a 60Hz, pero para poder recargar las baterías, que trabajan en DC, es importante transformar la corriente alterna AC en continua DC.
Por ello, este tipo de cargadores son los más usados, a pesar de que pueden ser limitantes en varios aspectos.
Otro factor clave al hablar de estaciones de carga de autos es la potencia con la que se alimenta a una batería. Esto va a depender del tipo de instalación y de los fabricantes.
Las estaciones de carga de corriente continua pueden ofrecer más potencia, es decir, una carga más rápida, siendo ideal para lugares de paso en donde el tiempo de espera se busca que sea menor.
Dependiendo del objetivo, tendrás que elegir la mejor opción para tu flotilla:
Tipo de carga |
Descripción |
Tiempo de carga |
Uso |
Doméstica |
Carga con una toma de corriente común |
100% en 14 horas |
Doméstico |
Semirrápida |
Buena opción para carga nocturna o jornada laboral |
Carga 100% en 4 horas |
Doméstico, público y corporativo |
Rápida |
Requiere un transformador eléctrico para incrementar la potencia. |
Carga 100% en 20 minutos |
Público y privado |
Ultrarrápida |
La tecnología más avanzada |
Carga 100% en 5 minutos |
Público y privado |
Existen diferentes tipos de estaciones de autoconsumo de gasolina. Algunos factores que influyen en la clasificación son: capacidad de almacenamiento, nivel de automatización y el uso que se le quiere dar dentro de la empresa.
Son ideales para organizaciones que necesitan mover el punto de carga dependiendo de sus operaciones.
Por ello, se suelen montar sobre remolques o camionetas y su capacidad es baja: entre 200 y mil litros aproximadamente.
Son las más comunes en empresas con una flotilla grande y se instalan permanentemente en la planta o estacionamiento de la compañía.
Los tanques tienen una capacidad que va de los 5 mil hasta los 60 mil litros y cuentan con dispensadores muy similares a los de las gasolineras convencionales. Pueden incluir techado, sistema contra incendios, software de control, etc.
Es importante considerar que se requieren permisos ante CRE y SEA.
Se trata de estaciones fijas, pero más sencillas. No incluyen software avanzado, pero permiten determinado control de consumo a través de herramientas como bitácoras o sistema de conteo mecánico.
Son más económicas, sin embargo, hay más riesgos de errores humanos y menos control sobre cómo se maneja el recurso.
Son las más sofisticadas, pues integran todo: desde control de acceso hasta la generación de alertas y reportes.
Se pueden emplear tarjetas magnéticas, RFID, códigos QR y hasta llaves electrónicas para usarlas y su software avanzado se conecta con plataformas de gestión de flotillas y ERP, ayudando a un control más efectivo.
Característica |
Estación de carga eléctrica |
Estación de carga de autoconsumo |
Tipo de energía |
Energía eléctrica |
Combustible fósil |
Costo de operación |
Bajo (energía más barata a largo plazo) |
Medio (depende del precio del combustible) |
Inversión inicial |
Alta (equipos + adecuaciones) |
Media (tanques, permisos y dispensadores) |
Velocidad de carga |
Lenta a media (depende del tipo de cargador) |
Rápida (minutos por vehículo) |
Autonomía por carga |
Limitada (entre 200 y 500 km) |
Alta (tanques llenos permiten largas distancias) |
Retorno de inversión (ROI) |
Medio a largo plazo (por ahorro energético y exención fiscal) |
Corto a medio plazo (por control de consumo y eficiencia operativa) |
Con el crecimiento de los autos eléctricos, hay diferentes herramientas que facilitan encontrar estaciones de carga cercanas y gestionar el proceso, facilitando hasta el método de pago.
Si estás pensando en implementar una flotilla eléctrica, pero no sabes cómo gestionar esto, debes saber que existen apps especializadas que muestran la ubicación exacta de las estaciones y dan información clave sobre:
El proceso de pago dentro de las estaciones de carga se ha vuelto cada vez más sencillo y accesible por las plataformas digitales.
Te explicamos los métodos más comunes:
Muchas estaciones tienen habilitada la opción para pagar directamente desde la app que usas para localizar las opciones disponibles.
Esto ofrece múltiples ventajas, como:
Algunas estaciones de carga ofrecen la opción de pagar con tarjetas de proximidad. Estas tarjetas se vinculan a una cuenta personal o empresarial y a un método de pago previamente establecido.
Es una alternativa ideal para flotillas o usuarios frecuentes, pues evita el uso de efectivo o plásticos, agilizando el proceso.
Algunas redes privadas de estaciones de carga de autos ofrecen la opción de membresías mensuales o anuales que ofrecen:
Aunque el crecimiento de los vehículos eléctricos es importante, aún hay desafíos que se deben enfrentar, y hay tiempo para ello, pues de acuerdo con El Economista, se prevé que para 2030, México se convierta en el país con más vehículos eléctricos e híbridos en Latinoamérica.
Por ello, actualmente, se está impulsando la colaboración entre lo público y privado para lograr una infraestructura adecuada, por medio de: gobierno federal y estatales, empresas privadas, startups y compañías tecnológicas.
Con esto se busca resolver los retos actuales, como:
Como hemos visto, las estaciones de carga para autos eléctricos son más que un punto de conexión, por lo que es importante saber cómo funcionan y hacia dónde va la infraestructura en los próximos años.
Esta alternativa es muy importante porque, a medida que la red de carga se expande, también lo hace la confianza en la movilidad eléctrica. México tiene ante sí una gran oportunidad para adoptar tecnologías limpias que beneficien al medio ambiente, impulsen la economía y mejoren la calidad de vida de las personas, reduciendo la huella de carbono.
Si quieres formar parte de este proceso de transición hacia energía más limpia, ¡comienza con pequeños pasos! Un cambio como compensar las emisiones de CO2 producidas por tu flotilla ¡hace la diferencia aunque no lo parezca!
Así, poco a poco, se puede llegar a una movilidad eléctrica, que ayude a mejorar la calidad de vida de las personas y eficiente los recursos de las empresas.